Huelgas, paros y bien común
Percival Cowley sscc
Todos sabemos que un buen pedagogo enseña a sus discípulos que la mejor herramienta ante cualquier conflicto es el diálogo y nunca el garrote o el golpe. Todos sabemos que los enfermos necesitan a los médicos y que la salud es también un derecho humano. Sería interesante que los servidores públicos tuvieran clara esa noción y la responsabilidad consiguiente: el servicio que están llamados a prestar a la población ciudadana, que es la que, finalmente, paga sus sueldos.
Para los cristianos,
De los cuatro paros de los profesores, hubiésemos tenido el derecho de esperar alguna idea en relación con las reformas educacionales necesarias y pendientes y no sólo una preocupación —muy legítima, por cierto— respecto de sus ingresos económicos. De los médicos, la conciencia acerca de las personas, sobre todo de las de menores recursos, que han perdido su hora y deberán esperar pacientemente una nueva, paciencia que muchas enfermedades no tienen. De los trabajadores del sector público, en plena negociación respecto de sus ingresos futuros, que hubiesen confiado en sus dirigentes y en la mesa preparada para tal efecto.
Cuando la huelga (o el paro) es la primera medida a la que se recurre, se está afectando directamente al bien común, y, en este caso, nada menos que en la educación y la salud, dos temas que no son menores.
(Carta a El Mercurio, 12 Noviembre 2009)
Sí, también pienso que es difícil entender que para lograr lo deseado se utilicen herramientas que perjudiquen de alguna forma a otros. Sin embargo, también creo que las huelgas tienen 2 tipos de "huelguistas":los que se van a huelga y los que no colaboraron para que esto no pasara. No me consta que haya sido la primera herramienta usada.Si así fue, quizás es porque ya se ha visto que es lo único que realmente puede resultar. Tampoco sé que tipo de sueldos reciben, pero me imagino que son bajos o que están "al límite", pues no creo que anden reclamando más dinero porque ya no quieren volver a ir a Cancún estas vacaciones. Además, gran parte de esta gente tiene familia que alimentar y cuentas que pagar....cosa que se entiende mucho mejor cuando se tienen esos compromisos y responsabilidades. Dan ganas que estas situaciones no ocurran y me refiero a la injusticia social que causa las huelgas que perjudican a los más necesitados.
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