jueves, 4 de octubre de 2012

Mar para Bolivia

Por Pablo Fontaine ss.cc.

Lamentando el tono que ha asumido el gobierno de Bolivia para tratar el problema de su enclaustramiento, soy, sin embargo,  partidario de que Chile le entregue una salida al mar. Aunque nuestro país tenga derecho a ese territorio, pienso que podría movernos un espíritu de solidaridad que está por encima de lo estrictamente justo.

Chile goza de un bellísimo mar al que da una larga costa,  una de nuestras  grandes riquezas, en todos los sentidos de la palabra. Si entregáramos a Bolivia una franja de territorio con soberanía, estaríamos haciendo un gesto que sería apreciado por las demás naciones y contribuiríamos significativamente a la paz entre nuestros dos países. No se ve cómo podría considerarse esto como algo impropio  o  contrario  al amor patrio. Por el contrario sería una alegría para los chilenos estrechar la amistad con el país hermano, un ejemplo para el mundo y la satisfacción de una aspiración largamente sentida por los bolivianos.

Los mismos chilenos que regando con su sangre esas arenas, nos proporcionaros tales bienes, aplaudirían el que Chile se cubriera de gloria, mostrando su grandeza de alma.

Un  paso así presenta muchos problemas técnicos, pero lo importante es que tengamos un espíritu de hermandad y de futuro. El mismo Perú podría colaborar para facilitar una medida en vista de un bien para toda la región.

Puede pensarse que estoy proponiendo algo insensato. No será la primera  vez que el Evangelio de Cristo dé origen a locuras que resultan ser más sabias que la prudencia humana. 
          
Pablo Fontaine ss.cc.

1 comentario:

  1. Pablo un gusto leer tu escrito. Me parece interesante tu punto de vista. Es bueno tenerlo presente aunque sea difícil concretarlo pero no está demás apoyarlo.

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SS.CC. DEBATES. Gracias por compartir tus comentarios.